lunes, 15 de septiembre de 2014

This Mortal Coil - Song to the Siren


"¿Soñé que soñabas conmigo?
¿Estabas aquí cuando navegaba a toda vela?
Ahora mi estúpida barca zozobra
y mi amor se estrella contra tus rocas."
Tim Buckley y Larry Beckett, Song to the siren

La primera vez que tuve la suerte de escuchar esta canción no fue en un anuncio de colonia (por suerte), ni tampoco en sus diversas apariciones cinematográficas, como en Carretera perdida de David Lynch o en Desde mi cielo de Peter Jackson. Fue en un concierto de Héroes del Silencio, pues siempre acostumbraban a comenzar sus actuaciones con esta canción (y así lo estuvieron haciendo hasta su última gira del 2007): el escenario se iluminaba en diversos tonos calentando al personal con su ritmo lento y misterioso. Recuerdo que la canción me hipnotizó y que una vez acabado el concierto se me metió en la cabeza, pero no sabía nada más de ella, excepto que era cautivadora. Un año más tarde, en una entrevista de Enrique Bunbury leí que la canción se llamaba Song to the Siren ("La canción de la sirena"), pero no daba ningún dato más, y tuvo que pasar casi un lustro hasta que conseguir dar con ella.

Por entonces me ganaba la vida en una tienda de discos (si, niños, antes existían y eran hasta rentables), y un conocido se me plantó un día delante y me preguntó si teníamos la banda sonora de Carretera pérdida. Le dije que sí y se la enseñé. Le dio la vuelta, miró las pistas, y me devolvió el CD diciéndome que no estaba la canción que buscaba. "¿Qué canción?", pregunté. "Song to the siren de This Mortal Coil", me respondió. Y bueno, lo dije que también teníamos un disco de esa banda. Se llamaba It'll end in tears ("Acabará en lágrimas") y siempre me había llamado la atención su portada tan eterea en tonos sepia con una mujer medio difuminada en algo parecido a una noche estrellada. Se lo enseñé, le dio la vuelta y esta vez sí que estaba la cancioncita, pero al final no se lo llevó, pues el disco no era precisamente barato. Y yo que llevaba varios años husmeando la canción que usaban Héroes en sus conciertos, me pregunté si podía ser esta. Por desgracia, era el único disco que teníamos en la tienda de esa banda y estaba precintado, así que no podía coger el CD y meterlo en el equipo de música del local; además, tampoco estaba dispuesto a pagar tanto por una canción (sin olvidar, como supe más adelante, que exceptuando ese tema el disco es bastante aburrido). Por suerte, ya existía una cosa que se llamaba Napster, y aunque los módems funcionaban a una centésima parte de la velocidad que tiene ahora el ADSL, era suficiente para lograr descargarme la canción. Y para mi deleite, en cuanto la puse en el Winamp, descubrí que era la canción que llevaba diez años buscando. No se abrieron los cielos, pero casi.

Con el tiempo he ido redescubriendo la historia de Song to the Siren, que tiene tela marinera (nunca mejor dicho). This Mortal Coil, cuyo nombre se puede traducir como "este torbellino mortal", una frase sacada del famoso monólogo de "Ser o no ser" de Hamlet, no era una banda como tal, no señor. Era una especie de consorcio de amigos dirigidos por el productor músical Ivo Watts-Russell, que se dedicaban a grabar versiones de canciones viejunas. Publicaron tres discos que, vamos a ser francos, no son fácilmente escuchables, y si no hubiera sido por esta canción, no creo que los pocos que los conocen, los recordaran ahora. En octubre del 84 sacaron su primer disco, que fue precisamente It'll end in tears, y la segunda pista era Song to the Siren, que hacía ya un año que estaba en la lista de ventas, pues se publicó como single primero. Se trataba de un viejo tema de un poco conocido cantante de los 60 llamado Tim Buckley, padre del quizás más conocido Jeff Buckley, aunque los dos fallecieron jóvenes: el padre tuvo una sobredosis de alcohol y heroina con 28 años, y su hijo se ahogó mientras nadaba completamente vestido cantando Whole lotta love con 31 años. Pero a lo que íbamos, y es que aquí el amigo Ivo decidió versionar la susodicha canción que Tim Buckley publicó en su disco Starsailor, una extraña canción medio folk medio psicodélica que trata de manera lírica y poética de la manía que tenían las sirenas de la mitología griega de hundir los barcos a los marineros que las escuchaban. Personalmente, la versión que hizo Tim Buckley en el disco era claramente inferior a sus primeras versiones acústicas, pero nadie es perfecto.

Para su versión, Ivo Watts-Russell utiliza un fondo de sintetizador muy suave (hey, estamos en los ochenta, recordad), acompañado por dos de los componentes de Cocteau Twins, una de las bandas que solía grabar con él: Robin Guthrie tocando la guitarra y Elizabeth Fraser cantando con esa voz tan característica y que es, indudablemente, la que ha convertido esta canción en lo que es, una versión que sobrepasó con creces a la original hasta tal punto que es mucho más reconocida que el tema de Tim Buckley.

Song to the Siren estuvo en la lista de ventas de singles durante dos años, lo que era un pasote para un tema independiente como el de This Mortal Coil, y además de ser utilizada para "adornar" películas y anuncios, la canción ha sido versionada por multitud de artistas, entre otros por Robert Plant, Bryan Ferry, George Michael, John Frusciate, Sally Oldfield, Sheila Chandra, David Gray, The Czars (una versión que no desmerece para nada a la original), Brendan Perry de Dead Can Dance, o mi adorada Sinead O'Connors. Pero como la versión de Elizabeth Fraser ninguna, y tanto lo creo que lleva siendo mi tono de móvil durante años...

domingo, 14 de septiembre de 2014

Síndrome de bufón


"Es lo que la psiquiatría moderna ha pasado a denominar síndrome del bufón (The jester syndrome: Men who always laughs, libro de 1983 de Kan Diley), caracterizado por la incapacidad de afrontar con seriedad determinados aspectos de la vida, un método de defensa psíquica bien establecido que si no es reconducido y tratado puede llevar a estados depresivos o autoreclusivos."
Daryl von Franz: El problema del Puer Scurrae

"El bufón piensa que es sabío, pero el hombre sabio se reconoce como bufón."
William Shakespeare, Como gustéis